Durante el verano, es habitual buscar lugares y actividades que nos mantengan frescos, dado que en muchas ciudades y pueblos del país, las temperaturas son siempre muy elevadas. Además, en las grandes ciudades, el asfalto es propenso a retener el calor, por lo que cualquier persona que viva rodeada de asfalto y no tenga árboles cerca, la temperatura del edificio siempre será mayor. Ante esta premisa, son muchos los compradores que optan por pisos con jardines comunitarios, donde estas zonas verdes puedan combatir el calor retenido por el asfalto así como ofrecer una mejor estética para la urbanización. En Novoveral, como expertos en pisos de calidad, queremos compartir las distintas ventajas que posee contar con un jardín común y zonas verdes dentro de una comunidad. Si buscas un piso de estas características en la ciudad de Madrid, no dudes en consultar nuestros ya construidos pisos en venta en El Cañaveral de Madrid.
Una de las principales ventajas que ofrecen los pisos con un jardín en las zonas comunes, sobre todo en los meses más calurosos es mantener el entorno fresco, de tal forma que, la temperatura de la comunidad será más baja que en el exterior. Con esto, cualquier vecino consigue ahorrar en la factura de la luz, puesto que el uso del aire acondicionado será aún menor, si encima dentro de la urbanización existe una piscina comunitaria donde poder refrescarse.
En segundo lugar, al contar con un jardín, se puede disfrutar de un espacio al aire libre sin la necesidad de preocuparte por su mantenimiento completo, ya que el cuidado y mantenimiento del jardín comunitario son responsabilidad de la comunidad. Esto también ayuda a tener un mejor contacto con la naturaleza, más allá que un elemento decorativo. Tener acceso a un jardín comunitario te permite disfrutar de la naturaleza sin tener que salir de tu hogar, pudiendo así relajarse, leer o directamente socializar con otros residentes. Junto con la despreocupación por el mantenimiento está la despreocupación de la familia, puesto que los más pequeños pueden disfrutar de estos espacios verdes para jugar sin alejarse de su casa. De esta forma los padres podrán realizar otras tareas mientras que sus hijos se divierten dentro del espacio cerrado y seguro que proporciona la comunidad.
Una vez vistas las ventajas más directas en las personas, también cabe destacar las múltiples ventajas medioambientales, que de una forma u otra, nos vemos beneficiados todos. Los pisos con jardines comunitarios, más aún en las grandes ciudades, ayudan a mejorar la calidad del aire. Esto sucede porque las plantas absorben dióxido de carbono y expulsan oxígeno durante el día, que junto al clima más húmedo que generan, son grandes elementos para mejorar el aire y entre otras cosas, la huella de carbono. Al proporcionar un espacio verde dentro de un entorno urbano con mucho asfalto, los jardines comunitarios ayudan a reducir la necesidad de áreas de estacionamiento pavimentadas y otros espacios urbanos donde abunda el carbono.
Por último, un jardín dentro de una comunidad ayuda a fomentar la biodiversidad urbana, lo que incluye hierbas, arbustos y plantas por el lado vegetal; y pequeños animales como los erizos o pequeños reptiles como las salamanquesas, animales no venenosos que se alimentan principalmente de mosquitos.