En pleno verano, con la recuperación económica en marcha y una buena parte de la población vacunada, es normal querer hacer planes para después de las vacaciones. Proyectos personales, profesionales, familiares… Si entra dentro de tus planes hacer realidad tu sueño y comprarte una vivienda nueva en Madrid, ¿sabes cuánto puedes gastarte y qué tienes que hacer para conseguir una hipoteca?
Dado que el sector inmobiliario ha resistido a la pandemia mucho mejor que otros sectores, y viendo que tanto las hipotecas fijas como las variables resultan en estos momentos muy atractivas, parece el momento ideal para retomar el proyecto de comprar la casa que tanto has deseado. Pero no es aconsejable ponerse a buscar piso ni solicitar créditos hipotecarios sin saber lo que realmente podemos asumir.
En primer lugar, recuerda que existen varios tipos de hipotecas: fijas o variables. En las hipotecas fijas, el interés no varía durante toda la vida del préstamo. En las variables, el interés va cambiando según las subidas y bajadas del euríbor, que es el índice de referencia más frecuente en los créditos hipotecarios. Hay también hipotecas mixtas, en las que se paga una cuota fija durante un primer período y después se pasa al tipo variable. Las clases de hipotecas no se diferencian solo en el interés (fijo o variable), sino que cada tipo tiene sus peculiaridades en cuanto al plazo máximo de amortización o a las posibles comisiones de cancelación total o parcial.
En segundo lugar, debes saber con qué presupuesto puedes contar. Para ello existen herramientas digitales que calculan cuánto te puedes gastar en función de la zona, el dinero de que dispones y tus ahorros. Este último punto es muy importante. Si quieres comprar vivienda nueva y conseguir una hipoteca para poder pagarla cómodamente a lo largo de los años, debes tener ahorros. Esto es así porque los compradores no solo deben pagar el 20% del precio inicial de la vivienda, sino también en torno a un 10% adicional de gastos entre impuestos, tasas, gestiones…
No siempre resulta fácil ahorrar, sobre todo a los más jóvenes. Sin embargo, hay que hacer un esfuerzo, ya que la mayoría de las hipotecas cubren hasta un 80% del precio de la vivienda, si bien hay algunas excepciones y se dan situaciones en las que se financia el 100%. Si es tu caso, si crees que puedes comprar tu casa sin contar con ahorros, habla con tu entidad financiera para ver qué posibilidades hay (tener un avalista, acudir a un intermediario financiero, presentar otra vivienda como garantía, comprar un piso del banco, pedir un préstamo personal además del préstamo hipotecario…).
En definitiva, si quieres comprarte un piso y solicitar un préstamo hipotecario, debes informarte bien de los tipos de hipotecas que existen y de cuál te conviene más, debes establecer el dinero máximo que te puedes gastar (por medio de una herramienta digital y, si es posible, con el asesoramiento de un profesional) y debes procurar ahorrar todo lo posible para afrontar todos los gastos iniciales y poder, después, vivir de manera cómoda disfrutando de la casa que tanto has deseado.