Últimamente hemos hablado mucho del crecimiento inmobiliario que se está produciendo en España. Desde los inicios de la pandemia, el mercado inmobiliario en nuestro país no solo ha resistido, sino también ha evolucionado y crecido, sobre todo en lo que respecta a la compraventa de viviendas. Los expertos del sector inmobiliario auguran, para un futuro cercano, un aumento de la venta de pisos, en especial en la Comunidad de Madrid, Andalucía, Cataluña y la Comunitat Valenciana. Son buenas noticias, que dibujan un panorama muy alentador, en el que se prevé que suban las ventas un 25% en el segundo semestre de este año 2021 y que este crecimiento inmobiliario dure, por lo menos, hasta 2023.
La recuperación del sector de la vivienda ha sido tan sorprendente que hay quien ha hablado, incluso, de un nuevo «boom» inmobiliario en los próximos dos años. Durante la pandemia –siguiendo los datos de 2020 analizados en el informe inmobiliario de la consultora Forcadell y la Universidad de Barcelona—, la recesión del mercado supuso una caída del 14,5%, mucho menos que la caída que provocó la crisis económica de 2008 (un 32,6%). Según esta misma fuente, el precio de las viviendas de segunda mano se redujo entre un 5% y un 10%. Esta caída tan leve se debió al escaso exceso de oferta, además de otras razones como los tipos bajos de interés y la disposición de los bancos a conceder créditos hipotecarios. Los profesionales del sector han estudiado también que, a pesar de la crisis de la COVID-19, el grupo de población de clase media y alta ha mantenido el interés por adquirir nuevas propiedades.
En el segundo semestre del año 2021 en el que nos encontramos, se espera que continúe el crecimiento inmobiliario y que este dure hasta 2023 e incluso hasta más tarde. El informe citado anteriormente de la consultora Forcadell y la Universidad de Barcelona predice un crecimiento en las ventas de un 25% en lo que queda de año y de un 15% para el año 2022. En cualquier caso, los expertos también advierten que este boom inmobiliario no llevará a una burbuja inmobiliaria, como ocurrió la otra vez, y que el sector de la vivienda no tendrá un peso tan grande en la economía nacional como en otras décadas para que se produzca una burbuja.
¿Cuáles son las razones de este crecimiento anunciado para 2021 y 2022? De acuerdo con el citado informe, los motivos son la confianza en la rápida recuperación económica, la disponibilidad que muestran las entidades bancarias para conceder préstamos hipotecarios y el aumento de la oferta inmobiliaria. La subida del número de hipotecas fue de un 41% entre junio de 2020 y junio de 2021, según apunta la Estadística Registral Inmobiliaria del Colegio de Registradores de España.
Por último, como ya hemos destacado otras veces en este blog, el aumento de operaciones de compraventa de vivienda lleva consigo una subida del número de hipotecas. De nuevo siguiendo la Estadística Registral Inmobiliaria del Colegio de Registradores de España, el número total de hipotecas firmadas en junio aumentó un 33,4% en comparación con junio de 2020, aunque las cifras varían de unas comunidades autónomas a otras. En concreto las hipotecas de vivienda crecieron un 41% entre junio de 2020 y junio del 2021, lo que indica, una vez más, la buena salud del sector inmobiliario.
