Durante los últimos años, la importancia de la relación con los vecinos se ha ido perdiendo poco a poco. Hemos pasado de conocernos todos en los pueblos y en los barrios a apenas saludarnos en el ascensor en las grandes ciudades, a volver por la noche a casa sin hacer vida de barrio o a subirnos en transportes públicos llenos de desconocidos. Sin embargo, entre las muchas cosas que ha cambiado la pandemia, creo que una de ellas ha sido la relación con nuestros vecinos. Asociaciones vecinales que muestran su solidaridad en los barrios, vecinos que aplauden juntos desde los balcones, jóvenes que hacen la compra y ayudan a sus vecinos más mayores… Esta nueva importancia de las relaciones vecinales me ha empujado escribir la entrada de hoy. ¿Cuál es la mejor manera de crear comunidad con tu comunidad de vecinos?
La vida en las grandes ciudades no se presta a la convivencia entre vecinos. Parece que desconfiamos de cualquiera que entre en nuestro edificio, y los niños y preadolescentes apenas salen solos a la calle como hace unos años. Pero las nuevas promociones inmobiliarias, como las de Novoveral en el barrio de El Cañaveral (en el distrito madrileño de Vicálvaro), sí suponen un nuevo concepto de «comunidad».
Por un lado, la mayor seguridad de estas zonas residenciales urbanas hace que perdamos el miedo a relacionarnos con los que nos rodean. Las zonas comunes de cada promoción –jardines, parques infantiles, piscinas, gimnasios, salas multiusos…– contribuyen en gran medida a establecer redes de contactos e incluso nuevas amistades.
Si estás pensando en establecer el futuro hogar de tu familia en una vivienda como las de las nuevas promociones de Novoveral, piensa que no serás el único que persiga esa clase de proyecto. Por supuesto, no todos los habitantes de una comunidad de vecinos van a tener la misma edad, e hijos pequeños, ni los mismos intereses… pero sí encontrarás un ambiente familiar que favorecerá el desarrollo de los más jóvenes conviviendo con personas de su edad en los parques infantiles y en la piscina, y con más razón en una época en la que, por razones sanitarias, se recomiendan las comunidades burbuja y se hace tan difícil disfrutar del ocio en otros lugares.
Por otra parte, las zonas comunes de las urbanizaciones, en especial las salas multiusos, contribuyen en gran medida a crear comunidad: estas salas no sirven solo para las reuniones de vecinos, sino que son utilizadas para celebraciones de todo tipo (Halloween, Navidad, cumpleaños…), para clases y actividades deportivas, etc. También la piscina en verano favorece la convivencia entre vecinos, y si hay pistas deportivas (por ejemplo, de pádel), se pueden organizar campeonatos o torneos dentro de la comunidad.
Por último, es aconsejable conocer a los vecinos de una zona incluso antes de embarcarte en la compra de la vivienda. Al fin y al cabo, son ellos quienes podrán contarte de primera mano el ambiente que hay en la comunidad y los gastos que supone.