Los estudios vigentes sobre la evolución de los precios de la vivienda coinciden en que durante el año 2021 no se ha producido ningún tipo de bajada, por ello las personas que se adelantaron a esta situación a principios de año se están viendo beneficiadas de sus compras de bienes inmuebles. De esta forma, una vez más apelamos a un mercado inmobiliario con una capacidad y adaptación a las circunstancias envidiables, siendo un valor refugio tanto para compradores de viviendas con fines de usufructo, como para inversores que deciden optar por este mercado. Al contrario que las previsiones durante los primeros meses de pandemia, la vivienda ha cumplido con creces las malas expectativas de dichas previsiones.
Al encontrarnos en los últimos días de 2021, cabe hacer un repaso de la evolución de los precios de vivienda durante el año y cómo vamos va a ser la entrada de año, acompañada de datos objetivos que desvelan el buen momento del mercado inmobiliario para llevar a cabo una compra de vivienda, dado que se espera una continuación del crecimiento de los precios.
Antes de nada, es importante poner todos los elementos en contexto, ya que la situación de pandemia alteró por completo nuestras prácticas cotidianas. En cuanto al mercado inmobiliario, ello se tradujo en una exigencia de más rentabilidad a los activos causada también por una significativa caída de las rentas y ocupaciones. Aun así, con todo en contra hemos asistido a una significativa recuperación de las cotizaciones, alineándose con los precios objetivos marcados para el 2021. También, durante este año se ha observado un cambio de hábitos en lo que a compra de inmuebles se refiere, donde, por ejemplo, la necesidad de un espacio adaptado para llevar a cabo teletrabajo es un elemento demandado por los compradores. Ante esta situación, los expertos aconsejan llevar a cabo políticas de financiamiento a bajo coste junto con expansión de ahorros para que las familias puedan endeudarse de forma segura, manteniendo así las tendencias al alza de los precios de vivienda.
En el caso de 2022, varios expertos apuntan a la aceleración de cambio de ciclo, lo que se traduce en un proceso de estabilización que finalmente provoque una subida de precios de forma más pronunciada que la vista actualmente. Con ello, se prevé un 2022 envuelto en crecimiento y expansión de las ventas de bienes inmuebles, ya que se ha visualizado claras diferencias con el fin de año de 2021. El año pasado (2021), uno de los indicativos de la situación fue la poca demanda nacional, que, junto con la inexistente demanda extranjera, ralentizaba en gran medida la ansiada recuperación. En cambio, para el 2022 se tienen unas expectativas positivas, empezando por la previsión de un crecimiento notable del PIB, una mejora de la tasa de desempleo y la finalización de medidas tomadas en la pandemia como los ERTEs. De esta forma, se augura un 2022 marcado por la subida de precios de la vivienda y por ello, una buena oportunidad para los que estén barajando alguna adquisición de bienes inmuebles